sábado, 10 de mayo de 2008

Primer Discurso de Albert F. Brandel.


Milagros A Través Del Servicio

Nunca olvidaré el 11 de septiembre, y siempre recordaré el 12 de septiembre y los muchos días que le siguieron. Todos sabemos que el 11 de septiembre de 2001 fue el ataque contra las Torres Gemelas de Nueva York. Lo que ocurrió después me dejó una impresión por igual vívida. Todos los días, durante meses, los Leones se encargaron del almacén central en Nueva York que contenía los suministros para el salvamento en el Nivel Cero. Siete días a la semana los Leones estuvieron presentes para asegurar el mejor resultado posible de una tragedia horrenda.El servicio dado inmediatamente después del 11 de septiembre en Nueva York, Washington y otras partes, se convirtió en un plan a largo plazo para ayudar a las familias de las víctimas. Multitud de Leones se aseguraron que las familias pudieran pagar los servicios públicos, repararon los hogares y las llevaron al médico. Coordinaron retiros de dolientes. Apoyaron la orientación vocacional y la educación de los niños. Eran actos usuales de bondad, lo que los Leones suelen hacer. Sin embargo, fueron milagros a través del servicio.

Las personas que llevaban pesadas cargas las vieron aligeradas y su paso fue más fácil. Los Leones les mejoraron la vida. ¿Quiénes eran estos Leones? Eran Leones comunes que respondieron a una necesidad apremiante. En mis viajes, a veces me han preguntado quiénes son exactamente los Leones. Pues bien, sin querer parecer engreído, diré que los Leones son héroes cotidianos. Nos ocupamos de nuestro servicio, enriqueciendo sin gloria o notabilidad las vidas de otros. Así sucede con los Leones de otras partes, día tras día, año tras año, y nuestros milagros a través del servicio colman las brechas en nuestras comunidades.

Somos héroes cotidianos. Ayudamos a los que sufren pérdida visual a ajustarse a su trastorno, damos audífonos a los que los necesitan, damos a los jóvenes habilidades para la vida con Lions Quest, equipamos hospitales, construimos escuelas y apoyamos la capacitación vocacional para minusválidos. .. calladamente y sin bombo y platillos hacemos de nuestras comunidades un lugar mejor para vivir y criar la familia.Durante mi año presidencial celebraré que los Leones hacen milagros a través del servicio y son héroes cotidianos. No es adulación propia, sino una forma de promover nuestro servicio. Quiero celebrar el servicio de los Leones a la comunidad, renovar el orgullo de lo que significa ser León y comunicar a todo el mundo lo que hacemos por construir un mañana mejor. Enorgullecernos de lo que hacemos nos dará más energía y motivación para proseguir nuestras grandes obras y aumentar nuestro servicio. Estamos en un viaje juntos en el año Leonístico 2008-2009. Caminemos garbosos con la cabeza en alto y los corazones orgullosos. Digamos nuestra historia unos a otros, a otros clubes y distritos de Leones y al resto del mundo que aún no saben con certeza lo que hacemos y lo bien que lo hacemos.

Es probable que la mayor parte de los Leones y el público asocien a los Leones con nuestra labor en pro del ciego, lo que está muy bien. Sin embargo, iniciemos el día en que al ver a un León la gente también diga "He allí un héroe cotidiano, alguien que marca la diferencia." Recuerden que aun el más pequeño acto de bondad puede tener un efecto enorme

Albert F. Brandel, Presidente.
Asociación Internacional de Clubes de
Leones